martes, 23 de mayo de 2023

La gripe de dios



La gripe de dios tiene ausencia de letras

y es como si no existiera la gripe de dios;

y existe y es verdad y la providencia 

doblará tus rodillas al filo de la noche.


Invento para cadenas; remos para los esclavos

del tiempo; control del espacio de viejas que 

lloran en confesionarios llenos de esperma. 


Rotos, ellos, confiando en las tablas gritan: 

"Somos más libres", mientras la soga forma 

la llaga; y la llaga rompe la vena que infecta

la sangre del lamepisos que quiebra la baldosa 

de su iglesia a fuerza de rezar.


La gripe se extiende y dios estornuda cada vez

más fuerte. El moco de dios, lo llaman; la peste 

de las cavernas, la llaman; la ira del comeniños 

que roe el diente recién caído.


Y yo, impasible, miro la enfermedad que ha 

asolado ciudades, cerebros y razones..., sin letra.


¡Teme la gripe de dios en tu alcoba o muere

estornudando su costra divina! Yo, antes, muerto.




lunes, 20 de marzo de 2023

Lo cósmico se arrastra I Entrada 110


El guía cósmico repta como ofidia

y desenreda los secretos del abismo

invitando a los valientes a adentrarse en sus cavernas.


¿Qué verdades se ocultan tras su expresión?

¿Qué terrores se esconden en cada soplo y movimiento?


¿Es el viento que desliza su lengua sibilina 

en busca de claves que abren puertas a lo ignoto?


En la oscuridad, el aliento es peligro y promesa;

es llave y danza al mismo tiempo para el circo de

los horrores.


Y en el aire frío y oscuro, el sonido de la serpiente

resuena en la noche como un eco de muerte

que invoca sombras en la niebla

y fantasmas para soñar lento.


¡Oh, viento misterioso! ¡Oh, culebra seductora!

Guíennos hacia simas más profundas

y revelemos los secretos del universo

mientras retamos al trilero de la noche.

domingo, 19 de marzo de 2023

Un momento raro I Entrada 109


Bajo un cielo de cristal y luna pálida, intrincado enigma de tiempo y espacio, suspendido en un vértigo de alas y viento, allí, en la frontera del sueño y lo real, surge un momento raro, tan etéreo y fugaz.

Del silencio brotan notas de una melodía olvidada; susurros de un pasado que ya no existe; ecos de risas que, en la niebla, se desvanecen; y el roce de una sombra, que a lo lejos, danza.

Un destello de lucidez en el océano del caos; una chispa de lo desconocido, lo inexplicable; un instante suspendido entre lo efímero y lo eterno; una pausa en la sinfonía de la vida y la muerte.

El alma se sumerge en un abismo de anhelos entrelazados en el enigma de este momento raro, donde lo tangible se desvanece en el vacío y lo invisible resplandece con intensidad deslumbrante.

Un momento raro, efímero y sublime, que, como un cometa en su viaje celestial, irrumpe en la quietud del universo dejando tras de sí una estela de asombro y misterio.

Y en ese instante, cuando lo cotidiano se transforma, donde lo improbable se funde con lo posible, allí, en la cima del éxtasis y la desesperación, un momento raro se convierte en inmortalidad.

viernes, 26 de noviembre de 2021

Soy fría corteza I Entrada 108

Soy fría corteza que hace de escudo a la erosión. Soy ardiente sangre de la tierra que avanza sin pena. Soy oxígeno entre lo divisible que se cuela por la muerte. Soy cascada que se jacta de su peso mientras ríe. Soy el zorro que vi en un sueño mientras sudaba. Soy el ángel descastado que vive en un corazón criminal. Soy la gaviota que cruza su mirada contigo, enfermo. Soy el hueso que te roe sin dolores en su pecho. Soy viajante entre muros rodeando este barro. Soy adiós interminable para mutantes y rezos. Soy el que robé el miedo al distraído gigante. Yo soy volcán, devorador de dioses y tú, patética carne, no eres nada.

miércoles, 3 de noviembre de 2021

John Doe y el smog I Entrada 107

El tiempo condena al ciervo, lunático por el smog que traen los hombres desde lugares desconocidos. Yo camino frágil, inmerso en un zarandeo químico a través de una selva imaginada entre bosques más humildes y cercanos. El indio del curare me apunta desde las sombras, a través de su alma me apunta mientras desconozco la verdadera necesidad porque el frío condena al ciervo, lunático por lugares desconocidos donde hombres fabrican el smog; lunático por hombres que respiran el smog en lugares desconocidos que han inventado.

El límite me obliga de todas formas. La línea recomienda mirar de soslayo a la tentación del Kaliyuga, al horror de los horrores que es invisible a la costumbre de los hombres que miran el smog sin ver nada más que sus propios reflejos.

lunes, 25 de octubre de 2021

Una ilusión en el fuego I Entrada 106

Es en la expulsión terrenal donde la crueldad se convierte en miedo y todo el mundo tiene barrios que quiere y recuerdos perdidos en marcos inexistentes que no han acunado hasta el estallido. 

Yo solo conservo algo de cordura, para ir tirando como dicen. La publicidad apuñala el recorrido atropellado, en tanto escuchas a voceros buscando entre el serrín algo que alargue el drama, páginas que contarán más pérdida, dolor y alguna que otra caries que ningún dentista curará gratis.

Busca la lágrima amiga mía. Encuentra el mirador desde el que ver las venas abiertas de una humanidad asustada que solo se une en ágoras exentas de fuego y llenas de palabras vacuas que disfrazan la verdad que oculta el día. Y el sol arriba, observando al asustado bípedo que derribaría sin dudarlo a su hermano hasta que la lava no le queme los pies.

Nada hará desaparecer tu credulidad, porque el orden te devolverá a tu sitio y allí, morirás de aburrimiento y realidad, quizás amparándote en santos descalzos que te avergüenzan siquiera pensándolos.


domingo, 13 de noviembre de 2016

John Doe los espera I Entrada 105

Todo deslucirá cuándo entremos en el último 'checkpoint', ligeros de carga y radiantes escapistas del dolor. Nada será lo mismo desde la mirada del cuervo libertario que nos arrastró allí. No más reflejos malogrados que tintinean en el crepúsculo de algo roto-insano-vacuo. Nada de papeles ...ya te lo digo yo: que las burocracias importan poco cuando la flaca baila, tarareando canciones de antaño en cálida placidez embrionaria.

Y no quiero volver nunca más a respirar la especie, sus fracturas y enfermedades. ¡Dejen de experimentar! ...les grito, por si alguno empatiza y reflexiona sobre esta comida abandonada al huracán gravitacional; sobre este alimento que exuda la salsa emocional que aliña sus festines.

No me traigas más, cosmos o lo que seas, que ya he tenido suficiente de este escondite inglés.

Y sabiendo esto, me voy feliz.

jueves, 8 de septiembre de 2016

John Doe en el plasma I Entrada 104

En la entrada del castillo espera enlutada la flor de mis deseos. No hay diferencia entre el viento y el sonido que yace bajo eternos lamentos abiertos en el plasma. Me siento a escribir y ya, no hay más ni menos: cogiendo legajos de la parte oscura, acarreando siempre desde el punto aquel en recombinación para el escape. ¿Se me entiende? ...espero que no. Lo bueno lo malo lo feo así sin comas te gusta(?) Yo creo en un dios anárquico que estornuda sobre su creación y tira el pañuelo a la dimensión desconocida. Yo creo en la gracia obtusa de un bebé gritando ¡NO! desde la vulva fractal que lo parió. Yo creo en ilusiones más allá del velo con corrimiento al rojo que significa frío dentro de mucho/dentro de nada. Yo creo en el plasma que hará que vuelvan "...las oscuras golondrinas en tu vida su muerte a colgar..." Yo creo en Satán hablando a los insectos mientras la luna lo mira, lo arrulla, lo mira. Yo creo en John Doe con hipo fulgurante destrozando filosofías. Yo creo en que creo algo más allá del credo que creó la creencia que no creo. Yo... me pongo religioso cuando no debo. 

Más allá del primer helio, un ser dormita. 

lunes, 29 de agosto de 2016

John Doe se espaguetiza I Entrada 103

Enciendo una cerilla, la última, para recordar el tiempo analógico y sentirme orgulloso de mi situación. Una nave, así de fácil, teniendo hijos a propulsión mientras miro acercarse al devorador de mundos. Repaso las ecuaciones con una sonrisa y basculo unos grados para no errar. Falta ya poco para sumergirme en esa lavadora cósmica que tanto he esperado. No habrá nada más allá... supongo, o eso espero. Sin temblar, enciendo el cigarro mientras la llamita casi me quema los dedos, tan absorto como estoy contemplando líneas de radiación indultadas hacia el "vacío". 

"¡Qué hermoso!" -me digo. "Hora de ponerse el traje". 

Recostado espero, sintiendo la física de la nave ajustando el ángulo. Pensé que el conducto de residuos era lo más apropiado. "Se está cómodo aquí" -pienso. 

Por el ruido sé que la nave orbita ya, fuera de peligro, el disco de acreción. Lo decidí así porque no es lo mismo. El bípedo flotando... mejor. 

Ahora no recuerdo nada anterior. Solo nado hacia la singularidad, embutido en este traje que a ratos corrige ligeramente el rumbo vía propulsores. "¿Los programé bien?". Sí... ya lo noto... el tirón. Cada vez más rápido, rápido, rápido. 

¡SÍ! ¡AHÍ VIENE LA ESPAGUETIZACIÓN!

lunes, 22 de agosto de 2016

John Doe es un alien I Entrada 102

John entró en el bar y pidió una cerveza. Se la bebió caliente por no protestar, adaptándose  a la mezcla de humo, sudor y mala educación de aquel lugar infecto. Nadó entre las miradas de los bichos disecados en las paredes, imaginando ser uno de ellos durante eones: vigilante, científico de una raza distante esperando ser recogido. Sí, les diría que reventaran el lugar; que mataran a todos para perfeccionar el vaivén cuántico y hacer sitio a la nueva carne. Con el tercer trago salió de esa ensoñación barata robada a la desesperación. ¡Qué grande hubiera sido descamar a los bípedos él mismo! Ya embriagado, salió a la calle, sin puntos y aparte ni leyes-mierda. Miró arriba: en la Luna se recortaba la nave imaginada: tan sofisticada y letal como había soñado. ¿Soñaba? Rió. Ondas, partículas, conexión creada. -¿Habéis venido a buscarme? -preguntó. La respuesta fue clara, tranquilizadora... En ese momento se sintió ligero, transportado. Miró atrás: las lenguas de fuego lamían un planeta que debió morir hace tiempo. -Adiós -dijo. Por un rato contempló el mar rojo purificador. Luego miró a sus iguales. Acariciado por sus mentes, se despidió del cuerpo y empezó a recordar. Ya libre, prometió volver a cagarse en el erial resultante. El próximo cúmulo de galaxias acogería sus carcajadas. 

Ya en su planeta, John se mete en la máquina de SIMULACIÓN: John entró en el bar y pidió una cerveza. Tiró al suelo el brebaje caliente y se los cargó a todos.

Bien por John ;)

martes, 16 de agosto de 2016

John Doe y Angélica I Entrada 101

Angélica era la señora grandilocuente del sitio, toda llena de rosas y colibríes retozando sin conocimiento. Algunos la llamaban La Descastada del Maligno; ...pero yo sabía que tenía que salvarla, por lo menos en algún momento, cuándo los demonios no miraran o la luna decidiera que sus fases habían muerto. Y así me deslicé a través de las cañerías industriales que venían de la calle Bovary. Las ratas me hablaban, contando secretos del inframundo, del amo y sus excrementos. Yo les respondía con un beso o dos y seguía, sintiendo bocanadas de hedor que firmaban en el paladar un cuento sin retorno. Finalmente alcancé la escupidera del tubo para escuchar el canto del metal sobre sus tiernos muslos. Por qué de esa agonía, yo, tenía que ser testigo?!. Me lancé contra ellos justo después del rebote: desgajando la carne, desmembrando y partiendo, amortajando las entrañas... 

Ahora estoy sentado, mirándola, tan bella y maltrecha, hasta que la podredumbre abismal se la lleve.

Viaja, mi pequeña reina, hasta los confines del agujero supermasivo.

La gripe de dios

La gripe de dios tiene ausencia de letras y es como si no existiera la gripe de dios; y existe y es verdad y la providencia  doblará tus rod...